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Cuando el espacio es pequeño, sala, dormitorio y cocina forman un todo. A pesar de ello, puedes seguir recibiendo a tus amigos en casa, decídete por un biombo, para mantener cierta intimidad. Su versatilidad es tan variada que, incluso en espacios amplios te permitirá separar ambientes.

El biombo es un signo de elegancia y distinción cuando está ubicado en los espacios apropiados. Además es una magnífica solución para separar ambientes y, al mismo tiempo, decorar la estancia o, simplemente, como elemento decorativo en cualquier rincón.

Dividir el mismo espacio con un biombo te permitirá mantener dos ambientes y ‘ampliar’ metros a tu vivienda.

ESPACIOS DISTINTOS

Conservar un mínimo de intimidad en apartamentos en los que el dormitorio comparte espacio con la sala de estar es fundamental para conseguir diferenciar áreas de actividad y de descanso.

Si dispones de un amplio salón donde poder ubicar una zona de sofá para mantener una amena charla cuando estás en casa con tus amigos y familiares, puedes separar el área de la mesa de comedor con un biombo sin ocultar las dos zonas.

Una propuesta para estos casos es un biombo de acero en negro con los característicos círculos. En cada uno de sus cuatro paneles, el hueco entre los círculos permite ver los dos lados de aquello que separan.

ESPACIO DE TRABAJO

Muchas personas trabajan desde casa y necesitan que su hogar disponga de un espacio como oficina o simplemente desean un lugar para el uso del computador y otras funciones.

En estos casos, cuando no hay opción de poner un pequeño despacho, un biombo es el elemento perfecto para separar el lugar de trabajo de la sala de estar, tanto en ambientes funcionales como en hogares con una decoración más ‘chic’.

USO DEL CRISTAL

Un biombo con cristal transparente puede ser ideal e inocuo para una decoración que no se quiera recargar. El detalle que destaca lo aportan los pies sobre los que se apoya: elige los torneados, sugerentes y elegantes.

ESTILO RÚSTICO

Para viviendas de campo hay distintas opciones. Un ejemplo son los biombos con armazón de forja, fuerte y rústico y con bordados  en listón de seda, blancos y sutiles, o con encaje.